Blog Eva Llaguno

Siempre que es el cumpleaños de alguien en mi familia comemos fuera todos juntos. El 13 de junio es el cumpleaños de mi abuelo y este año hemos ido a comer al restaurante Trueba. Ya habíamos estado pero mi hermano mayor tenía ganas de volver, porque la última vez que fuimos éramos muy pequeños y casi no nos acordábamos. 

Este restaurante está en Bilbao, más concretamente en Colón de Larreátegui. La verdad es que nos encantó. Desde que llegamos, todo fue genial. Nos atendieron muy bien desde el primer momento. Además, las camareras fueron súper amables, atentas y siempre con buena actitud. Da gusto cuando el personal se preocupa porque todos estemos cómodos y disfrutemos de la comida.

El local es muy agradable. Es espacioso, limpio y con un ambiente tranquilo. La decoración está cuidada, pero sin exagerar, lo justo para sentirse a gusto y poder hablar sin mucho ruido. A nosotros nos colocaron en una mesa grande al fondo, donde cabíamos todos muy cómodos.

La comida nos gustó mucho. Todo lo que pedimos llegó a tiempo, es decir, apenas tuvimos que esperar entre plato y plato. Se nota que usan productos frescos y de muy buena calidad. Pedimos varios platos distintos para compartir y todos estaban riquísimos. Las raciones eran generosas y todo estaba en su punto. Las camareras estuvieron pendientes todo el tiempo, pero sin resultar pesadas y nos ayudaron con las recomendaciones del menú. Por último, los postres tampoco defraudaron. Probamos varios, pero para mi lo mejor fue la pantxineta, se la pidió mi hermano pequeño y estaba espectacular. En ese momento, le dimos los regalos a mi abuelo y todo le gusto mucho. 

En resumen, fue una comida perfecta. Todos salimos muy contentos, mi abuelo sobretodo. Sin duda, yo repetiría y por ello lo recomiendo totalmente.