Sevilla

 No puedo recordar ningún viaje aparte de el de Sevilla, ya que superó todas mis expectativas. 

Nunca olvidaré el 6 de abril del 2024 a las 22:00 en el estadio La Cartuja. Pero bueno no me voy a adelantar y os voy a comentar el mejor viaje familiar de mi vida.

En enero mi ama nos dio la gran sorpresa de que había cogido hoteles para la final, cuando ni habíamos jugado la semifinal. Unos meses más tarde, nos tocaron las entradas en el sorteo, pero solo teníamos tres y en la familia éramos cuatro. A mi aita no le importó cedernos la entrada ya que él tenía amigos que se iban a quedar en la fanzone llamada “Athletic Hiria”. 

Decidimos ir hacia Sevilla unos días antes para aprovechar y hacer turismo, exactamente llegamos el 4 de abril a las 5 de la tarde. Nos levantamos muy pronto, cogimos las maletas y mi aita nos estaba esperando con el coche para irnos ya. Las horas en el coche no fueron muy agradables ya que estábamos muy cansados y nerviosos. Al llegar al hotel, nos duchamos a todo correr y salimos a ver la Torre del Oro, la Maestranza, La calle Betis, La plaza España y pasear por el río del Guadalquivir. A la hora de cenar fuimos con unos amigos de nuestro pueblo, que habitan en Sevilla. Y con lo cansados que estábamos decidimos irnos a dormir.  

Al día siguiente otra vez toco madrugar, esta vez estabamos mas nerviosos porque ya solo quedaba un día para la final. En las calles se iba notando el ambiente y Sevilla se estaba llenando de camisetas rojo y blancas y de ikurriñas. Otro dia mas de turismo, la verdad que en mi vida me iba a imaginar que me iba a gustar ir a visitar los distintos monumentos, pero la historia de Sevilla me enamoró. Ese día visitamos: Los reales Alcázares, La catedral, La Giralda, El parque Maria Luisa, El barrio Santa Cruz y muchos sitios más. No tengo palabras para describir esos días. 

Por fin llegó el día que todo el mundo quería que llegara. El sábado, día de la final, no madrugamos tanto ya que habíamos quedado con amigos de nuestros aitas para ir a tomar algo cerca de la catedral y la giralda, que ahí es donde más gente había. Según llegamos no me lo podía ni creer las calles estaban “petadas” de athleticzales y no se veía a gente de Mallorca. Más tarde decidimos ir a el Athletic Hiria y bueno eso ya era más ambientazo. Vinieron artistas como Oxabi, Henry Mendez (el jefe de el Tiburon)... Llegó la hora de ir al campo y comenzamos a ir 2 horas antes. El camino fue eterno ya que estábamos todos  con muchas emociones y alguno que otro un poco pasado. Por fin llegamos a el campo, no nos lo podíamos creer. Llamamos a mi aitite, que gracias a él pudimos estar ahí, y le dimos las gracias y le pudimos transmitir nuestras emociones desde el campo. No tengo palabras para transmitir el momento durante el partido. Al finalizar ni no lo creíamos, estábamos en un sueño. Nos quedamos a celebrarlo en el campo cantando con los jugadores y al finalizar fui a buscar a mi aita y me quede celebrándolo con sus amigos. Unos días inexplicables e inolvidables!