Blog 2 bis Jon Iturriaga

 Hace un par de semanas visité la bolera del Max Center con unos amigos, y en general fue una experiencia divertida, aunque con algunos aspectos mejorables. Compramos una oferta de 12 euros por persona, que incluía tres partidas, una bebida y las zapatillas para poder jugar a los bolos. Me pareció un precio bastante razonable, teniendo en cuenta todo lo que ofrecía el paquete y todo el tiempo que pudimos estar.

Al llegar, nos encontramos con una cola bastante larga, lo que hizo que la espera fuera bastante aburrida. Aun así, el personal fue muy amable. La dependienta nos atendió bien, explicó todo con claridad y nos ayudó a elegir la talla correcta de zapatillas sin problema. Se notaba que estaba acostumbradas a trabajar con mucha gente y se mantenía en los momentos más estresantes.

El ambiente en la bolera era animado. Sin embargo, la música estaba excesivamente alta, lo que dificultaba mantener una conversación sin tener que levantar la voz. Por momentos se hacía un poco incómodo, especialmente entre partidas, cuando queríamos hablar o comentar como habíamos jugado. Aun así, el espacio estaba bien cuidado y era limpio.

Las pistas funcionaban correctamente, el sistema de puntuación funcionaba bastante bien, aunque a veces contaba mal los puntos. Además, el tiempo entre partidas no fue excesivo y cada partida duraba un poco más de 30 minutos. Además, el hecho de que la bebida estuviera incluida era muy bueno, ya que ayuda a hacer más llevadera la espera y el calor del ambiente.

En conclusión, la bolera del Max Center ofrece una buena relación calidad-precio, un trato amable y una experiencia divertida. Pero, si mejoraran la gestión de colas y bajaran un poco la música, sería un plan perfecto para una tarde lluviosa o un día que no haya nada que hacer con amigos.